Empaques: una de nuestras especialidades
Masterlitho ofrece una gran variedad productos y servicios; donde hemos revolucionado, en estos últimos tres años, es en la familia que integra empaques y etiquetas.
Empaque y etiquetas comparten parte del proceso:
Pre-prensa
Prensa
Impresión
Proceso de pegado
¿Quién o qué necesita un empaque?
Son muchas las industrias o las iniciativas comerciales que necesitan encargar empaques para ofrecer sus productos. En nuestro día a día, una parte significativa de lo que pasa por nuestras máquinas es para empaques de la industria farmacéutica, médica y alimentaria. En los últimos tiempos también se han multiplicado los emprendimientos que requieren empaques para enviar sus productos por correo y, para ello, también ofrecemos soluciones.
No tenemos un mínimo en cuanto al volumen o cantidad que un cliente pueda pedirnos. Podemos hacer desde un empaque hasta un millón en un trimestre, pero siempre, entre mayor sea el volumen, el precio será menor – cuenta Ernesto Brenes, Ejecutivo de cuentas de Masterlitho.
Antes de llegar a las diferentes etapas por las que pasa cualquier empaque en el que trabajamos, vamos a entender un poco más cuáles son las opciones de empaques que se pueden hacer en Masterlitho.
Empaques que se pueden hacer en Masterlitho
Los materiales que usamos
El material más común que trabajamos en Masterlitho es cartulina y su grosor varía, dependiendo del peso de lo que se empacará. Así entonces, podemos usar cartulina de calibre 12 (es una de las opciones más delgadas) para productos como blísteres de pastillas, mientras que la de calibre 22 (la más gruesa), se usa para botellas, entre otras. El número del calibre indica las milésimas de pulgada, por ejemplo, calibre 18 quiere decir que son 0.018 milésimas de pulgada. En cuanto a su calidad, se utilizan algunas que provienen de molinos de bosques certificados, mientras que otras se fabrican con materiales reciclados con fibras vírgenes. No está de más aclarar que en Masterlitho no hacemos empaques terciarios, que son los que se hacen en cartón corrugado (como las cajas de olor café). En cambio, nuestra especialidad es el empaque plegadizo.
El papel es nuestra cosa favorita (por obvias razones) conozca más del porqué y cómo hacemos “magia” con e, aquí: Papel: aprendamos sobre tipos de papel y sus usos
A modo de ejemplo, estos son algunos productos para los que se usan los empaques plegadizos:
Pasta de dientes
Chocolates en caja
Cajas de té
Medicamentos
Tipos de empaques
Dentro de las necesidades de los clientes encontramos diferentes tipos de encargos. Algunos requieren cajas tipo tubo, que si bien su nombre podría hacer creer que son cilíndricas, en realidad son más bien cúbicas o con forma de prisma rectangular (la ironía). Muchas de ellas requieren una sola pega entre los lados, a un lado de la caja.
En cambio, a otras les llamamos “de fondo automático”, entre las que están las cajas de té. Algunas son semiautomáticas y otras de “auto-erección”. Por último, entre los tipos de empaques, están las cajas de armar, que se arman y desarman sin la necesidad de un solo pegue.
La primera impresión es muy importante, y es difícil tener “una segunda primera impresión”, le contamos aquí la importancia de su empaque: Empaques: una buena primer impresión
La impresión de empaques
Al hablar de las impresiones que se usan en los empaques; tantos los empaques alimenticios como los farmacéuticos tienen particularidades. En ambas industrias se requiere el uso de tintas certificadas, lo que obliga a los laboratorios a hacer un análisis previo de las que se usará, para asegurarse que vengan con una certificación de origen. Las impresiones se pueden hacer por ambos lados, es decir, como decimos en la jerga de las imprentas: tiro y retiro. Existe la opción de usar cuatro tintas de una cara y cuatro tintas por la otra, o bien, ocho diferentes de un solo lado.
La creatividad de quien diseña es lo que, al final, da las formas de lo que se va a imprimir. Lo mejor es que esta persona trabaje muy en conjunto con la imprenta para asegurarse de que su idea sea reproducible y que, así, se eviten reprocesos – asegura José Sánchez, Gerente Técnico de Masterlitho.
Pre-prensa: Es la etapa en la que se define el diseño y cómo se adaptará este a los pliegos, buscando que se optimice el proceso posterior de impresión. Lo más común es que esta etapa sea trabajaba por el cliente o, al menos, en el caso de Masterlitho, así es como se da en la gran parte de los casos.
Prensa: Cuando nos envían el diseño, nos encargamos de hacer un ‘dummy’, o prueba, para asegurarnos de su funcionalidad y revisar el resultado de las tintas de los colores previamente seleccionado. Este producto se le envía al cliente para su revisión y aprobación.
Tal vez alguna palabra te parezca extraña, como “dummy”; aquí te dejamos acceso a el Glosario de Impresión Offset e Impresión Digital.
Impresión: Cuando el diseño ya está definido y probado, lo que sigue es la elaboración de las placas metálicas que se usarán para ingresarlas para la parte de la impresión. Se utiliza la cartulina o papel seleccionado para el empaque.
Acabado: Una vez que todo el material pasó por esta fase, se le pasa un barniz, con los propósitos de proteger la durabilidad de los colores, favoreciendo su durabilidad, así como de embellecer el producto. La apariencia puede ser brillante o mate, según el barniz que se use (hay ultra mate, mente, brillante y ultra brillante). Existe la posibilidad de hacer una mezcla entre estos acabados, lo cual genera una apariencia contrastante. En algunos casos se utiliza un recubrimiento en plástico para darle resistencia al empaque. Este también puede ser brillante o mate.
Ensamblado: Por último, las cajas suelen llevar un troquel, que se utiliza en una máquina de corte que tiene cuchillas para cortar los bordes, y dobletes para marcar los vértices de la caja.
Pegado: Como explicamos antes, no todos los empaques requieren esta fase, pero en aquellos casos en que es necesario, esto ocurre en la última etapa, también por otra máquina, aunque en casos muy específicos con empaques particulares, podría requerirse un pegado manual.
Y acá concluimos el proceso de elaboración de los empaques, un trabajo que disfrutamos mucho y con el que nos alegra enormemente ayudar a múltiples clientes. Esperamos que, al terminar este texto, haya quedado claro cada uno de los pasos y las facilidades que ofrecemos para asegurar el mejor empaque, funcional, atractivo y de acuerdo a las necesidades de cada solicitud.
